El cuerpo humano tiene una capacidad increíble de experimentar algo nuevo e inmediatamente adaptarse desde el primer día. Esto es particularmente impresionante cuando hablamos de ejercicio. En tan sólo una semana de ejercicio, aunque sea tu primera vez en muuuuuuuuuuucho tiempo, tu cuerpo, sin excepción alguna, presentará un par de cambios.
- Dolor y cansancio: Ya sabes lo que dicen: “”si no duele, no vale” Hacer ejercicio requiere dañar un poquito los músculos, lo cual provoca dolor e inflamación. Poco después el músculo se repara, reconstruye y se vuelve más duro que antes. Y no te preocupes, ese pequeño dolor y cansancio solo dura 2 a 3 días (o menos) y son el primer indicador de unos buenos resultados.
- Encontrarás claridad: Un entrenamiento sólido incrementa la circulación de la sangre y la cantidad de oxígeno que recibe el cerebro. Esto quiere decir que tu cerebro podrá funcionar de mejor manera y estará alerta. Es por eso que, una rutina de cardio antes de un examen o una entrevista de trabajo, es lo mejor que puedes hacer.
- Tu piel brillará: Un buena circulación de la sangre le permite al cuerpo eliminar las toxinas dañinas, haciendo así que la piel tenga un brillo adorable. Sin mencionar que el sudor abre los poros, así que combate el acné y otras enfermedades de la piel.
- La vida es más fácil: Hacer ejercicio le enseña a tu cuerpo a utilizar el oxígeno de mejor manera. Por lo tanto, el ritmo cardíaco disminuye, mejora la salud del corazón y se vuelven más sencillas otras tareas que antes eran complicadas. ¿Por qué crees que cada día puedes hacer más sentadillas?
- Tomarás decisiones más saludables: Notarás que te es más fácil rechazar una dona de chocolate por una ensalada. Y es que el ejercicio es la máxima expresión de amor propio, lo cual podría mejorar tu estilo de vida ¡en TODOS los sentidos! Si haces ejercicio, le darás a tu cuerpo el respeto que se merece y, por ende, te ayudará a tomar mejores y más saludables decisiones.
- Tendrás dulces sueños: Si alguna vez tuviste problemas para dormir, ésta seguramente no fue tu primer idea, pero es una muy buena. Hacer ejercicio en las mañanas te ayudará a dormir mejor en las noches para recuperarte. Y no es porque tu cuerpo estará más cansado (aunque sí), sino porque tú te sentirás increíblemente satisfecha.
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