REPRESAS HIDROELÉCTRIAS

Represas hidroeléctricas: ¿manos a la obra?

Foto de turbina de represa hidroeléctrica

Turbina de la represa hidroeléctrica Yaciretá Apipé.

Citrum, pequeña ciudad serrana de un país imaginario, está ubicada a
orillas de un río caudaloso y rodeada por plantaciones de naranjos y
pomelos, que constituyen el principal recurso económico del área. Las
zonas que no fueron desmontadas para el cultivo conservan gran cantidad
de especies animales y vegetales propias de la región.

La ciudad está creciendo y necesita nuevas fuentes de trabajo. El
intendente impulsa un ambicioso proyecto: construir una represa
hidroeléctrica con un embalse de mediano tamaño (30.000 hectáreas
aproximadamente).

La instalación y el funcionamiento de una represa hidroeléctrica
tiene diversos efectos sobre el ambiente y la sociedad. A continuación,
mencionamos algunos de ellos.

  • Desplazamientos de parte de la población a otras áreas (ya que
    podría ser necesario inundar terrenos cultivados o edificados para
    hacer el embalse).
  • Acceso de la población a servicios eléctricos más económicos.
  • Pérdida de biodiversidad por anegamiento de áreas naturales.
  • Mejoras en la infraestructura para las comunicaciones terrestres
    (arreglo, mantenimiento y/o extensión de la red ferroviaria y vial,
    etc.).
  • Construcción de hospitales, escuelas y otros servicios públicos.
  • Creación de nuevas fuentes de trabajo (en la represa y en otros rubros: construcción, turismo, etc.).

Los habitantes de Citrum conocen la historia de una ciudad muy
particular de la Argentina llamada Federación (provincia de Entre
Ríos). La ciudad fue fundada con el nombre de Mandisoví en 1750 por
Juan de San Martín y destruida por luchas civiles e invasiones
portuguesas. El gobernador Urquiza trasladó la ciudad a orillas del río
Uruguay y la refundó con el nombre actual de Federación en 1847. Sin
embargo, en 1979 la construcción de la represa de Salto Grande y de su
gran embalse (78.000 ha) inundó la zona, y la antigua ciudad quedó bajo
las aguas. A raíz de ello se planificó el traslado de la ciudad a su
emplazamiento actual.

¿Ocurrirá algo similar en Citrum? El intendente de Citrum se
encuentra hoy con un grupo de especialistas para debatir el futuro de
esta pequeña ciudad y, por supuesto, ¡estás invitado a la reunión!

Represa hidroeléctrica

Las represas hidroeléctricas son sistemas diseñados y construidos
para producir energía eléctrica mediante el aprovechamiento del caudal
de los cursos de agua.

Los grandes sistemas hidroeléctricos están constituidos por extensos
cuerpos de agua denominados embalses . Éstos son creados
artificialmente mediante la construcción de una presa o muralla de gran
altura que atraviesa en forma perpendicular el río. En los embalses se
acumula agua para asegurar su suministro en épocas de sequía. Si el
emprendimiento hidroeléctrico es de menor importancia, se construye una
presa de baja altura, sin embalse o con uno pequeño. En este caso, el
flujo de agua que se utiliza para generar electricidad puede alterarse
según la variación del caudal en distintas épocas del año.

Para el funcionamiento de la represa, se deja fluir el agua
acumulada en el embalse a través de conductos. De esta manera se
impulsan hidroturbinas que, al rotar, generan energía eléctrica. La
energía generada se envía, mediante cables de alta tensión, hasta las
centrales de distribución y transformación de la electricidad.

La represa divide al río en dos sectores: aguas arriba (desde el embalse hasta la naciente del río) y aguas abajo (desde las hidroturbinas hasta la desembocadura del río).

El funcionamiento de la represa hidroeléctrica no produce emisiones
de dióxido de carbono ni de otros contaminantes. Sin embargo, puede
generar procesos de erosión y disminución de la fertilidad natural de
los terrenos agrícolas que se encuentran aguas abajo de la represa,
dado que esos suelos, tras la construcción de la represa, ya no reciben
los sedimentos y nutrientes que transportaba el río. Estos sedimentos,
al quedar retenidos por la represa, van rellenando el embalse (proceso
conocido como colmatación), y reducen la vida útil del sistema.

La vida útil de una represa es muy variable. Ello depende de
diversos factores; por ejemplo, si se construye una represa en una zona
húmeda (que recibe abundantes precipitaciones) y que ha sido
deforestada, el exceso de sedimentos que arrastrará el río contribuirá
a la colmatación del embalse y eso reducirá su vida útil.

La presa también actúa como una barrera infranqueable para muchos
peces: interrumpe la migración para el desove de muchas especies. Para
evitar este problema se construyen conductos especiales, similares a
escaleras mecánicas o ascensores. Sin embargo, no suelen ser muy
efectivos, ya que la mortandad de peces registrada en este pasaje (por
estrés, golpes o heridas) resulta muy elevada.

Actualmente, la energía de las plantas hidroeléctricas proporciona
el 22% de la electricidad en el mundo. La hidroenergía tiene una
producción energética neta elevada, costos de operación y mantenimiento
relativamente bajos, pero el costo de construcción de todo el sistema
es alto.

Embalse

Un embalse es un lago artificial utilizado para almacenar agua, que
será utilizada por la central hidroeléctrica para generar energía. La
construcción y el funcionamiento de un embalse tienen diversos efectos
sobre el ambiente y sobre la comunidad.

Algunos efectos son beneficiosos para ciertas actividades
económicas. Por ejemplo, los embalses contienen el agua de las crecidas
y así evitan el anegamiento de tierras más bajas que la represa;
también proporcionan un abastecimiento controlable de agua para riego
de tierras áridas y semiáridas cercanas. Además, se utilizan para la
recreación deportiva, ya que en ellos pueden practicarse natación,
pesca y actividades náuticas.

Sin embargo, existen otros efectos que son conflictivos para la
sociedad y el ambiente. Por ejemplo, para la construcción de los
embalses se inundan grandes extensiones. Esto, en muchos casos,
ocasiona el desplazamiento de pobladores y la destrucción de gran parte
de la vida silvestre del área afectada. Además, la acumulación de agua
de un embalse hace subir el nivel de la napa freática (capa de agua
subterránea), lo que puede producir el anegamiento y la salinización
del suelo en los terrenos cercanos, y reducir la productividad agrícola.

En ambientes tropicales o subtropicales, los embalses constituyen un
sitio propicio para el desarrollo de algunas enfermedades, como la
esquistosomiasis (transmitida por unos parásitos que viven en los
caracoles que se desarrollan en estos ambientes y que pueden infectar a
los humanos). La evaporación del agua del embalse produce, también,
diversos cambios climáticos, generalmente relacionados con el aumento
de las precipitaciones locales.

Por otra parte, en estos cuerpos de agua suelen manifestarse cambios
físicos, químicos y biológicos ocasionados por la acumulación de
nutrientes (nitratos y fosfatos) que favorecen la multiplicación de
algas. Este tipo de nutrientes proviene de actividades humanas tales
como agricultura (fertilizantes), urbanización (aguas servidas) y
descargas de plantas industriales. El proceso de modificación de las
características del ecosistema acuático es conocido como eutroficación
y, además de afectar negativamente la calidad del agua (malos olores,
disminución del oxígeno disuelto, acumulación de toxinas, etc.),
contribuye a disminuir la vida útil de la represa.

Funcionamiento de una represa hidroeléctrica

Esquema de una represa hidroeléctrica

Vegetación de una represa

Esquema de navegación en una represa

Esquema del pasaje de peces

Esquema del pasaje de peces

Biodiversidad

La biodiversidad de especies representa la variedad y la abundancia
relativa de organismos vivos que comparten un mismo espacio y tiempo.

Los estudios de biodiversidad requieren el conocimiento de gran
cantidad y variedad de organismos y sus complejas relaciones, y
constituyen un tema central en ecología y en otras ciencias.

Los biólogos no han podido, todavía, calcular con precisión la
biodiversidad actual de nuestro planeta. Las cifras estimadas oscilan
entre los 40 y los 80 millones de especies diferentes (desde virus,
hongos y bacterias hasta plantas y animales). No obstante, hasta el
presente sólo se ha clasificado un millón y medio de especies, y el
número de especies estudiadas es aún menor.

El estudio de la biodiversidad es clave para implementar políticas
de desarrollo sustentable y para lograr formas de producción
ecológicamente sostenibles. Es decir, el estudio de la biodiversidad es
fundamental para saber cómo mantenerla y cómo aprovecharla para
beneficio de la humanidad. La gran variedad de especies proporciona
muchos elementos para satisfacer necesidades: desde alimentos y energía
hasta sustancias químicas para la industria y medicamentos. Por ello,
conservar la biodiversidad es tanto una prioridad ética como una forma
de garantizar nuestra calidad de vida.