LEONARDO DA VINCI.
Leonardo da Vinci, nació el 15 de abril de 1452 en Anchiano, cerca de Vinci. Para otros nació en Vinci, de ahí viene su apellido. A su nombre se le añadió el de su padre, “Ser Piero”.
En el año 1466, se mudaron a Florencia, Leonardo y su familia.
En 1468 muere su abuelo, y Leonardo, su abuela, su padre, su madrina y sus tíos, son los dueños de la herencia.
Sus primeros bocetos eran de tal calidad que tan pronto como su padre los mostró al pintor Andrea del Verrocchio, éste tomó al joven de catorce años como aprendiz en su taller, ya frecuentado por futuros artistas de la talla de Botticelli, Ghirlandaio, Perugino y Lorenzo di Credi. Así lo dice Vasari, referido al año 1462; no obstante, el ingreso de Leonardo en el taller de Verocchio fue posterior, encontrándosele como aprendiz en ese taller en 1469 o 1470.
Leonardo, hacia escrituras raras, que solo él las podía leer utilizando espejos. Allí estaban todos los secretos de sus inventos.
Para pintar, estudiaba el cuerpo humano por dentro y por fuera, sabía las proporciones exactas, las semejanzas y trucos de todo el cuerpo, era increíble la sabiduría que tenía dentro. Aunque se decía, que había nacido a “destiempo”, porque algunas cosas que hacia él, eran mal vistas, y en estos tiempos, no tienen importancia.
Creó un aparato “para volar”, semejante a las alas de un murciélago, entre cientos de creaciones.
El cuadro de Mona Lisa, o la Gioconda, era una mezcla de su cara, con la de su mamá, el recordaba que había tenido una infancia feliz cuando pequeño.
La inquietud de conocimiento que caracterizaba a Leonardo, fue beneficiada además por su talento como ilustrador, que le permitió materializar sus ideas mecánicas con claridad excepcional. Quinientos años después, muchos de sus dibujos pueden ser usados fácilmente como planos para crear modelos perfectamente funcionales. Fue de gran ayuda su modelo de “El hombre de vitruvio”.
El 2 de mayo de 1519, a los 67 años, muere desilusionado y amargado en el castillo de Cloux, cerca de Ambroise. En este lugar vivía como invitado del rey Francisco I de Francia que le había dotado de una pensión vitalicia. Allí lo sepultaron.
Por pinocha